La poesía no es de los géneros más taquilleros; y desde hace tiempo esto es así. Para muchos, entrar en el código de los poetas es complicado, aburrido, difícil, y se vuelcan entonces a la prosa, en busca de una lectura que se supone más amena y actual. Sin embargo, cada vez más se registra un cambio en la tendencia, reflejado en parte por los "instapoets". Adivinaste: se trata de poetas que usan Instagram como medio de expresión. Algunos regalan versos de mejor calidad que otros; no pretendo abrir ese debate. Sí creo que el que los logren viralizar ya da para la reflexión. La joven Rupi Kaur es, quizás, de las instapoets más conocidas. Publicado en 2014, su libro "Milk and Honey" vendió millones en el mundo. Está dividido en cuatro capítulos, cada uno colmado por poemas honestos y pasionales que lidian con un tipo de dolor diferente; pero no por un regodeo en el dolor mismo, sino que la premisa es que las heridas se curan y que "there is sweetness everywhere if you are just willing to look" (hay dulzura en todas partes si sólo estás dispuesto a observar). Entre otros temas, también se habla de la mujer y su cuerpo, la violencia, la sexualidad, el amor propio y el paternal. En todos los casos, la fragilidad está a flor de piel. Aunque breves y concisos, sus poemas son tan profundos que este no es un libro para devorar en una tarde, sino para digerir de a poco. Gran aliado para leer en el subte, acompañar duelos o regalar a esa amiga que no la está pasando tan bien... Porque, como ya hemos dicho tantas veces, ¿qué mejor compañía que un buen libro, cuando duele el corazón? Si leíste "Milk and Honey", te invito a que compartas tu cita preferida. Esta es una de las mías, tan simple pero tan real...: "People go but how they left always stays"